El nuevo proyecto de los museos protege el patrimonio y aporta una nueva dimensión a las colecciones

El nuevo mapa de los museos de Sitges que surgirá de las obras de reforma que está en curso aportará una nueva proyección de estos centros, que se adaptarán a las necesidades actuales y de futuro, aunque manteniendo y conservando el entorno patrimonial y arquitectónico que los ha definido desde sus orígenes, así como una nueva visión museográfica de sus colecciones.

 

La directora-gerente del Consorci del Patrimoni de Sitges, Vinyet Panyella, presentó al público el pasado domingo en el auditorio del edificio Miramar el proyecto en el que expuso el actual estado de las obras y las soluciones y reorientaciones sobre el proyecto inicial, con los criterios de conservar y proteger el entorno patrimonial en función de su valor artístico intrínseco y de las colecciones de arte que alojan. En el acto participaron el alcalde de Sitges, Miquel Forns, y el diputado de Hacienda y Recursos Internos de la Diputació, Carles Rossinyol.

 

Las obras se están ejecutando actualmente en los edificios del Cau Ferrat, Maricel de Mar y Can Xicarrons con el proyecto inicial reformado en el acuerdo de octubre del pasado año –como consecuencia de los cambios de gobierno del Ajuntament de Sitges y de la Diputació de Barcelona– en que se modificaba el anterior proyecto redactado en 2008. El acuerdo modificó el proyecto inicial y permitió suprimir la pantalla exterior de vidrio y las rampas de las pasarelas del Maricel de Mar, rediseñar la proporción de las aperturas de Can Xicarrons, rediseñar la solución de la proyección de las vidrieras del Cau Ferrat, así como la climatización de este museo eliminando la tarima de madera instalada a tal efecto y que alteraba radicalmente la planta noble del Cau Ferrat. Con la aprobación por parte de la Direcció General de Patrimoni de la Generalitat de este nuevo proyecto en las versiones básica y ejecutiva (enero y julio de 2012, respectivamente), las obras reemprendieron su curso con los nuevos criterios. Según señaló Vinyet Panyella en el acto del domingo, la tarima de madera de la planta noble del Cau Ferrat y los elementos constructivos de la pasarela encima del mar se han retirado.

 

A las nuevas líneas de actuación se acompañan estudios ya previstos para la recuperación de los colores originales de las baldosas antiguas (se han identificado diversas patologías y se está actuando para su recuperación) así como de las vidrieras. Hay que destacar también la restauración del suelo y la eliminación de humedades en el Cau Ferrat, entre otras actuaciones centradas en la recuperación y conservación patrimonial del entorno. El cambio del proyecto incide en la reforma integral del edificio de Can Xicarrons como eje museográfico e interpretativo, que contempla la reinstalación y acondicionamiento museístico de los elementos decorativos del edificio en los años que fue residencia de invierno de Charles Deering (1915-1921). En relación al proceso concreto de restauración de las baldosas del conjunto de Cau Ferrat y Maricel está previsto dedicarle una sesión específica.

 

Desde un punto de vista conceptual y centrado en las colecciones artísticas, el Cau Ferrat, que conserva su aspecto original a partir de 1933 que fue abierto como museo público, se define como “Templo del modernismo”; Can Xicarrons se convierte en eje museográfico e interpretativo del conjunto de edificios del Racó de la Calma y entrada única a los museos y Maricel constituye la combinación “Arquitectura noucentista y arte de todos los tiempos”.

 

La directora del Consorci indicó que las obras del Cau Ferrat finalizarán en el primer semestre del 2013 y las del Maricel en verano de 2014. Panyella evitó decir una fecha exacta, ya que “no abriremos con prisas ni precipitación: cuando abramos puertas quiero que el único trabajo pendiente sea acoger a los visitantes”. El diputado Rossinyol subrayó que la reorientación del proyecto no ha supuesto una inversión añadida, ya que el costo de las nuevas líneas de actuación que permiten mantener la estética modernista y noucentista y el espíritu de los edificios no supera la previsión presupuestaria inicial, que era de 9 millones de euros. El coste final previsto, según señaló Rossinyol, está por debajo de esta cifra y, según resaltó “El Ayuntamiento de Sitges no ha tenido que aportar un euro más”.

 

El alcalde, Miquel Forns, expresó la satisfacción del gobierno municipal por el proyecto final: “hoy estamos satisfechos, podemos decir que la reforma de los museos Cau Ferrat y Maricel de Mar respetan los criterios de protección del patrimonio arquitectónico, indispensables para poder continuar con las obras en curso”.

 

Unos museos con proyecto propio

Además de la supresión de los elementos y líneas que alteraban la estética de los edificios, a la reorientación de las obras le acompaña la del proyecto museográfico; es decir, el diseño está pensado para el continente y el contenido así como también para la funcionalidad necesaria para las colecciones y servicios. Durante su presentación –titulada “La reforma dels Museus de Sitges. Situació actual I línies d’actuació”– Vinyet Panyella detalló cuidadosamente la reorganización de las colecciones en los museos de la localidad, pensada bajo los criterios de unos museos con voluntad de formar parte activa del sistema cultural catalán.

 

El proyecto presentado por Panyella reordena las colecciones en los tres muesos de Sitges (Cau Ferrat, Maricel y Romàntic, con la extensión de la Fundació Stämpfli – Art Contemporani), intengrando también las colecciones no tasadas actualmente o cerradas al públicos –como la Cole·lecció de Marineria d’Emerencià Roig Raventós– aportando coherencia museográfica a su interpretación. Las 15.000 obras que configuran el patrimonio artístico de los museos de la localidad estarán estructuradas bajo criterios de conservación, protección y difusión del patrimonio y redistribuidas en el conjunto de espacios museísticos de Sitges.

 

Uno de los elementos más importantes del plan es que prioriza y reconstruye la unidad conceptual y museística de todo el Maricel, de manera que el Palau Maricel retorna a su identidad museística, tal como estableció en 1936 por aquél entonces director de los museos sitgetanos y del Museu d’Art de Catalunya, Joaquim Folch i Torres. Panyella ha previsto que el Palau sea la sede de exposiciones temporales y aporte la dimensión de las colecciones del museo de reproducciones y de hierro forjado de la Junta de Museos. La nueva orientación es compatible con el alquiler de espacios del Palau y la celebración de actividades culturales.

 

La reforma de los museos de Sitges. Situación actual y líneas de actuación.