Dos exposiciones temporales en Budapest y Girona y una presentación de colección en Valls tienen en préstamo obras de Museus de Sitges. Se trata de la Magdalena penitente, de El Greco, unos dibujos de Maria Rusiñol, un óleo y una cerámica de Lluïsa Denís y dos esculturas de Anselm Nogués. En los tres casos han sido cedidas temporalmente en condición de préstamo y aparecen expuestas con referencia explícita a su procedencia de los museos del Cau Ferrat o Maricel.
La Magdalena penitente, uno de los dos Greco del Museo del Cau Ferrat, está durante estas semanas en el Museo de Bellas Artes de Budapest, en una de las exposiciones más importantes sobre la obra del artista cretense. Cerca de 70 pinturas muestran una amplia visión de la obra de Domenikos Theotokopulos, en una antológica inaugurada el pasado noviembre y que terminará el 19 de febrero. Además del Cau Ferrat, se presentan obras que proceden de algunas de las pinacotecas más destacadas del mundo, como el Louvre, la National Gallery de Londres, la National Gallery of Arts de Washington o el propio Museo de El Greco de Toledo. En el Museo de Bellas Artes de Budapest, la Magdalena penitente –que pertenece a la Colección Santiago Rusiñol– aparece destacada en el reclamo publicitario de la exposición, junto con seis obras más de El Greco.
También este febrero finaliza la exposición Feresa de silenci, sobre las artistas que participaron en la edición de la revista Feminal, entre 1907 y 1917, la primera elaborada por mujeres en Catalunya. La muestra se celebra en el Museu d’Art de Girona y presenta una veintena de mujeres artistas, con obras procedentes de varios museos y colecciones, tanto nacionales como del extranjero. Museus de Sitges participa con el préstamo de siete dibujos de Maria Rusiñol sobre figuras femeninas fechados entre 1904 y 1907, así como dos obras de Lluïsa Denís: la pintura Plata i la ceràmica La font de la Verge, todas procedentes del Cau Ferrat.
Paralelamente, dos esculturas de Anselm Nogués, que forman parte del fondo del Museu de Maricel, se exhiben desde el pasado mes de diciembre, en el renovado Museu de Valls. Se trata de dos bustos de principios del siglo XX, Zíngara y Busto de una niña, que han sido cedidos en depósito por cuatro años para ser expuestas en la sala de artistas vallenses del Vuitcents.