La figura enmarcada. Obras singulares de la Colección Casacuberta Marsans
Sala Vaixells del Palacio de Maricel
Del 5 de julio al 29 de septiembre de 2024
Horario:
- De martes a jueves, de 10 a 14 h
- De viernes a domingo, de 10 a 19 h
Comisarios: Ignasi Domènech y Nadia Hernández
Visita guiada
Museus de Sitges expone en la recuperada Sala Vaixells del Palau de Maricel una selección de una de las colecciones privadas más relevantes de Catalunya, la Casacuberta Marsans. Se trata de la primera vez que un conjunto de las destacadas obras de esta colección –que abarca desde el Gótico hasta el Arte Moderno– se muestran al público.
La figura enmarcada. Obras singulares de la Colección Casacuberta Marsans tiene un doble punto de atención: por una parte, el conjunto de la veintena de pinturas expuestas; y, por otra, el papel determinante que adquieren los marcos, no como acompañantes de las pinturas, sino como parte fundamental de la obra de arte. El título de la muestra (La figura enmarcada) responde, precisamente, a ese papel crucial del marco como pieza integrante de la obra o, de hecho, como obra de arte en sí mismo.
La exposición está comisariada por Nadia Hernández, historiadora del arte y conservadora de colecciones, e Ignasi Domènech, jefe de Colecciones de Museus de Sitges, y se puede ver en la Sala Vaixells del Palau de Maricel hasta el 29 de septiembre, un espacio que recupera vida como sala para exposiciones temporales de los Museus de Sitges. La colección –impulsada por Fernando Casacuberta y Coty Marsans– se presenta por primera vez al público gracias a la generosa colaboración de sus propietarios, que prevén abrir un museo próximamente en Barcelona.
Les pintures expuestas. La selección de obras abarca un amplio marco cronológico, que va del Gótico a la pintura hispánica de finales del siglo XIX y el primer tercio del siglo XX. Se trata de 21 pinturas con nombres destacados de la historia del arte en Catalunya: desde Jaume Serra hasta Francesc Gimeno, pasando por Lluís Borrassà, Alonso Cano, Andrés Vaccaro, Ignacio Zuloaga, Pablo Gargallo o Hermén Anglada – Camarasa. La selección de las obras expuestas permite efectuar un recorrido esmerado y selecto por 700 años de historia de la pintura catalana.
El conjunto de la Colección Casacuberta Marsans está formada por cerca de 200 obras, entre pinturas, esculturas y artes del objeto. La mayoría de las obras son de arte medieval de la Corona de Aragón y de pintura de finales del siglo XIX y principios de los XX. En la última edición de la Jornada de Mercado del Arte, Coleccionismo y Museos –celebrada el pasado octubre, bajo organización de Museus de Sitges–, la Casacuberta Marsans protagonizó una de las ponencias centrales.
Els marcos expuestos. Además de la colección de pinturas que se presentan, la exposición La figura enmarcada. Obras singulares de la Colección Casacuberta Marsans Marsans tiene otro valor destacado: la importancia que se le da al marco como obra de arte. Todas las pinturas expuestas están enmarcadas en piezas de notable valor artístico, patrimonial e histórico. Pero además, la exposición presenta una treintena de marcos exhibidos como obras de arte, sin otro acompañamiento.
La valorización del marco desde una óptica artística y patrimonial ha sido en los últimos años un elemento destacado en los estudios de historia del arte. Esta tesis parte de considerar el marco como un objeto que se construye con la voluntad, no sólo de aportar solidez y proteger o vestir la obra, sino también como pieza que transmite unos valores estéticos del período en el que fue creado y que permite establecer un diálogo con la pintura que envuelve. En este sentido, museos como El Louvre o El Prado han iniciado recientemente un trabajo de valorización de sus marcos antiguos, que se ha concretado también en la creación de espacios expositivos monográficos y rutas señalizadas de los marcos más significativos.
La Colección Casacuberta Marsans destaca, además de por el valor de sus obras, por la búsqueda de importantes marcos antiguos para presentar sus pinturas. La colección reúne de forma original un significativo número de marcos de época de excelente calidad. Los trabajos de investigación y adaptación han sido realizados por el experto en este ámbito Horacio Pérez - Hita, considerado el máximo especialista en la materia en el Estado español.
El catálogo de la exposición incluye también un artículo de Ignasi Domènech, titulado Marcos antiguos y modernos en la Colección de Santiago Rusiñol, que pivota sobre el valor que el Señor del Cau fijó ya en estas piezas. El artículo subraya que “el Cau Ferrat de Sitges, el espacio donde Santiago Rusiñol presentó sus colecciones a partir de 1894, es un verdadero catálogo y manifiesto de las afecciones y obsesiones del pintor. En esta pequeña cámara de las maravillas donde cada obra y cada objeto luchan por hacerse un hueco, hay un elemento que sorprende: la elección de los marcos antiguos de las pinturas de diferentes períodos que cuelgan en sus paredes. Y este caso es interesante por la doble vertiente de Rusiñol, la de pintor y la de coleccionista; una doble perspectiva que le permitía comprender la pintura y sus necesidades”.
Colecciones privadas catalanas. La exposición La figura enmarcada. Obras singulares de la Colección Casacuberta Marsans es la segunda organizada por Museus de Sitges para dar a conocer al conjunto de la población las colecciones privadas catalanas, que en la mayoría de casos resultan inaccesibles para el gran público. El pasado año, la Colección Bertrán protagonizó la primera muestra, que permitió reunir obras de El Greco, Zurbarán y Goya, entre otros.
Esta apuesta por mostrar obras de titularidad privada permite enlazar también con una línea que forma parte de la identidad de los museos del Cau Ferrat, Maricel y Romàntic - Can Llopis. El mismo origen del Cau Ferrat radica en la colección de Santiago Rusiñol, como el del Maricel en la del Dr. Jesús Pérez Rosales. Por su parte, la colección de muñecas de Lola Anglada constituye un elemento central del Museu Romàntic.
Como sostiene Ignasi Domènech, “la colección de Santiago Rusiñol y la Casacuberta Marsans constituyen una especie de capicúa temporal del coleccionismo en Catalunya: el Cau Ferrat preserva y expone de manera permanente la colección privada catalana más antigua conservada en espacio en el que se formó, y las obras de la colección invitada por los Museus de Sitges en el verano de 2024 representan la imagen de una de las últimas y destacadas colecciones constituidas recientemente dentro del ámbito catalán”.